sábado, 28 de agosto de 2021

María de Castilla La Reina que Luchó por el Sueño Templario

 




Javier Más
Ediciones Altea
ISBN: 978-84-948886-5-6


Dejó caer Nieves Concostrina en su programa de historia que este libro era interesante y como nunca dudo del buen criterio de la historiadora y locutora de la SER me fui a buscarlo como loco, ya había leído con anterioridad algo al respecto del personaje de María de Castilla, reina de Aragón, hermana de Juan II, esposa de Alfonso V e y que gobernó en los años embrionarios de lo que supondría la unidad de Castilla y Aragón, pasando por las guerra civiles del siglo XV y creo que al igual que otras grandes mujeres la historia no ha hecho justicia con ellas y ya va siendo hora; ahora mi pero, ¿es esta la mejor forma de hacerlo? honestamente pienso que no, porque al final queda supeditada a dos hombres y eso que los mimbres con los que empezó Javier Más prometían mucho.

Por las fechas en las que está publicada se puede decir que la influencia de Dan Brown ha hecho estragos en los escritores de novela histórica, yo que he leído todo lo que ha caído en mis manos sobre la orden de El Temple y ojo, solo libros serios y formales, porque algunos son para no parar de reír desde el título, y el subconsciente colectivo ha hecho más por revelar falsos mitos ocultos de la orden de lo que en realidad fue, que no es más que un motivo económico miserable y de poder; digo esto porque eso mismo es lo que pasó con el Papa Luna o Benedicto XIII, un antipapa, que no se plegaba a los deseos de Francia y por lo que se montó un buen jaleo en esos años con cisma incluido; es decir que los conspiraciones nigrománticas, religiosas o mágicas que algunos ven no son tales, son cosas más simples, es la pasta y el poder, nada más, no hay que buscarle tres pies al gato para ver porque pasó tal o cual cosa. Pues esto mismo es lo que pasó en esos años, el papado, Francia y Castilla ansían la corona de Aragón, no hace falta meter a templarios, cáliz de la última cena o la tiara de San Silvestre; es cierto que los reyes cristianos desde tiempo inmemorial se lanzaron en la búsqueda de reliquias de las personas reconocidas como Santos o Santas, sin ir más lejos Felipe II bastantes años más tarde pero es dudoso que por ello se iniciaran guerras o por lo menos es lo que pienso, solo de acordarme como la madre del emperador Constatino dijo que tal cruz era la cruz de Cristo ya me hace sonreír, o la cantidad de clavos o espinas de la corona que hay en el mundo, en fin sigamos, lo que quiero decir que para escribir de esta interesante, fuerte, decidida y gran mujer le sobraban a la novela un motón de aditamentos que lo único que hacen es distraernos de lo que es lo importante, ella, la reina María.

La reina María de Trastámara es la esposa del rey de Aragón y hermana del rey de Castilla, durante su reinado Aragón estaba haciéndose fuerte en las posiciones de Italia, en contra del papado y de Francía -todavía no se ni como nos llevamos bien con nuestros vecinos con la cantidad de putadas que nos han hecho a lo largo de la historia-, en un tiempo en el que el rey estaba más ausente que presente, María tuvo que lidiar con los nobles catalanes, las intervenciones de Enrique  el esposo de su hermana en contra de su hermano y rey de Castilla Juan II para hacerse con la corona de Castilla y si a eso le añadimos que no dio herederos al trono a Alfonso, pues la verdad sea dicha, no parecía un tiempo muy halagüeño para la monarca; ahora bien vamos a los problemas añadidos de la novela, los Templarios fueron disueltos en 1312, en España las posesiones de la orden pasaron a la corona, en Aragón se aprovechó y se creó con sus castillos y encomiendas la orden de Montesa, en Portugal algo parecido pero en Castilla no, es decir que han pasado más de 100 años, ¿de qué herederos habla la novela entonces?, otro detalle, que manía con meter el linaje de Cristo -lo que decía de la influencia de Dan Brown y en un tono más divertido de Julio Muñoz Gijón, autor que recomiendo encarecidamente- para justificar un papado o una corona y a este respecto recomiendo un libro sobre las falsificaciones de la historia de Julio Caro Baroja con esa manía de justificar nuestro poder porque somos descendientes del mismísimo Noe por ejemplo, es que si aplicamos eso todos podemos decir que somos descendientes de Adán y Eva y después de todo este rollo que os he soltado, pues se hace creer que los Caballeros de la Luna son los herederos de los Templarios, que el Papa Martín V es un tipo malvado que quiere hacerse con el poder eterno y occidental cosa que no dudo, pero oye que quieres que te diga, según los textos bastante tuvo con acabar con el cisma de los tres papas al mismo tiempo; Francia pretende hacerse valer como potencia pero aún está inmersa en la guerra de los 100 años por lo que me temo que su influencia real era más de papel que otra cosa.

Como novela histórica está bien construida, te mantiene atento hasta el final, con cambios de ubicaciones constantes para que sepas que se cuece en cada momento y cada lugar ya sea el la corte aragonesa, la castellana o San Juan de Letrán (el Vaticano aún es un sueño en la mente de muchos artistas), con un lenguaje ágil y en capítulos breves para no eternizarse, los personajes no son legión de manera que puedes seguir la trama sin perderte dado que nos movemos en tres localizaciones importantes a la vez, Aragón (Valencia y Zaragoza), Roma y Castilla, como los personajes no son seres estáticos lo lógico es que viajen, ya sea a Nápoles, Florencia,  Avignon, Valladolid o Barcelona, según la necesidad histórica de la novela. María al principio es presentada como una mujer un poco abatida después de conocer la infidelidad de su marido y rey pero conoce Rodrigo, sobrino del depuesto y recientemente fallecido Benedicto XIII, antiguo jefe de la guardia papal y jefe de los trainers y de la orden de la Luna, unos soldados que parecen sugerirte que son los herederos del Temple ya desaparecido; con Rodrigo vive una intensa historia de amor prohibido -esto es lo que me a mi me sobraba, ¿es necesario que para que una mujer muestre carácter tenga que tener a un hombre en su vida? pues definitivamente no; con el rey Alfonso vive una relación de reyes que ya hemos visto en otras monarquías y para eso no hay que viajar mucho en el tiempo para verlo; Rodrigo vive para reivindicar el nombre de su tío que ha muerto envenenado, el Papa Benedicto XIII a los 94 años en Peñíscola, en un castillo que fue de la orden del Temple. Y aquí quiero señalar lo importante, esta mujer fue capaz de parar una guerra entre Castilla y Aragón plantando su santas posaderas entre los dos ejércitos y obligándoles a pactar una paz, ¿no es eso ya solo motivo para no perderse en otras tramas inventadas o ficticias si solo esto da para un libro?.

Salvo Rodrigo el resto de personajes son reales, existieron, por lo que merece la pena un viajecito a la wikipedia para saber más pero en el caso concreto de la reina María la wikipedia se queda corta y no la hace justicia; al nos ser un elenco demasiado numeroso la trama se sigue muy bien, con facilidad y sobre todo y lo mejor, con claridad, vamos que no es juego de tronos en personajes pero si y mejor en trama aunque lo de que Benedicto sea descendiente del mismo Cristo es tan poco digerible como los dragones.

En resumen, curiosa novela que arranca de forma muy prometedora pero que acaba de forma poco "fumable", con personajes que dan para mucho -María, Enrique, Juan II, Catalina, Martín V, Alfonso V, bien resuelta hasta casi el final -Dios ese rincón secreto donde esconden la tiara chirría- y de la que esperaba más.


No hay comentarios:

Publicar un comentario