domingo, 30 de septiembre de 2012

Fouché Retrato de un Hombre Político



Stefan Zweig
Editorial Acantilado
ISBN: 978-84-92649-83-9

Muchos ya habéis visto a Zweig en este blog pero lo que muchos no conocen es esta faceta de ensayista del genial escritor austríaco, Zweig  tiene varios ensayos sobre personajes históricos del siglo XIX y yo elegí la de este controvertido y apasionante político francés, un verdadero artista de la supervivencia no solo política porque en los años que este hombre manejaba los hilos de la política los cuellos eran afeitados un día si y otro también en las plazas de los pueblos de la Francia republicana.
Sospechaba erróneamente que sería un libro para gente ducha en historia pero la hábil pluma de Zweig hace de este ensayo y biografía un estudio apasionante nada pesado y lleno de ambiciones, intrigas, traiciones que te tienen pegado al papel desde la primera página hasta la última.
Fouché vivió la época apasionante de la historia de Francia, pasando por la revolución, el imperio o las restauración borbónica y siempre con un elemento común denominador y ese común denominador es él, su ansia de poder, sus tejemanejes y siempre saliendo indemne de sus propias maquinaciones, maniobras políticas tiradas con fineza y sutiles para que siempre pudiese estar a bordo del bando vencedor y cuando este fuese eliminado, guillotinado o mandado al exilio siempre pudiese culparle a un tercero lo que fuese para el salir libre y con más poder que antes.
Fouché comenzó como profesor de un seminario jesuita y con tan simples comienzos y siendo hijo de un comerciante pudo escalar a diputado de la Convención, procónsul de la misma y por la que sería conocido como la metralleta de Lyon -pone los pelos de punta saber el motivo de ese mote- y que le convertirían en enemigo de ricos y aristócratas, un feroz revolucionario y un comunistas adelantado a su tiempo; ministro de los gobiernos napoleónicos hasta convertirse en la segunda fortuna de Francia, es decir un verdadero camaleón de la supervivencia y del voracidad por ostentar en poder pero un ansia que siempre le hace estar en la sombra donde puede moverse sin peligro. De forma incansable y constante, con maniobras dignas de los mejores servicios secretos del mundo, Fouché hará solo lo que le convenga a él y nada más que a él, no persigue otra cosa y por eso Fouché es odiado y sobre todo, temido.
Una falta de escrúpulos que le harán ser un buen cristiano y luego un ateo amoral para morir recibiendo los santos oleos, de ser un exterminador de nobles a convertirse en el duque de Otranto, Fouché es un oportunista pero nada de lo que yo pueda contar podrá describir suficientemente a este hombre, tachado de traidor por casi todos, verá rodar las cabezas de sus principales y más encarnizados enemigos: Robespierre, Napoleón o el mismo Luis XVIII -hermano de Luis XVI y que muere en la guillotina gracias entre otros, al voto de Fouché para que sea ejecutado- y todos por sus turbias maniobras y en una época apasionante.
De todo lo que Zweig cuenta de Fouché creo que lo más acertado después de cerrar la última páginas es la conclusión que nos deja, Fouché nunca supo retirarse a tiempo, su afán desmedido de poder nunca tenía fin, ese apetito tan desmedido a otros les costó la vida y la guillotina pero el supo bailar siempre de la mejor manera para no verse implicado nunca, sus capacidad para mantenerse a flote y su creación de un servicio secreto como parte del ministerio de la policía estoy seguro que son motivo de estudio por parte de los servicios secretos de los países más poderosos de años posteriores. La conclusión de Zweig final creo que es de lo más acertada, Fouché no supo retirarse a tiempo y ese fue su fin porque Fouché no tiene vicios mundanos, no tiene inclinaciones por las mujeres que no sean la suya, es comedido con el dinero o no bebe, su único "vicio" es el poder pero no el poder para otros, es el poder para si mismo. 
Los principales instantes de la historia de Francia desde 1789 hasta 1815 tienen a este hombre siempre como protagonista, aprendiendo poco a poco, descubriendo que los silencios son más poderosos que las algaradas y los discursos y de esa manera se valerá del directorio para derrocarlo y mandar a Barras al exilio, de Napoleón para hacerse cada más poderoso y que incluso le permitió levantar un ejercito sin el conocimiento del mismo Napoleón para oponerse a los ingleses.
Hace años tuve la ocasión de ver la obra de teatro "La cena" y que era la noche en la que Napoleón ha sido derrotado en Waterloo y el rey Luis XVIII va a volver a París, las maniobras de estos dos intrigantes personajes, la obra estaba dirigida por Flotats y los papeles principales estaban encarnados precisamente por el mismo Flotats como Tayllerand y Carmelo Gómez como Fouché, la obra era magnífica y con semejantes intérpretes y directos aún más y ya entonces me picó la curiosidad por saber más de semejantes "cabrones".
Los duelos con Napoleón son impresionantes al igual que con Robespierre  y ya solo por eso merece la pena ver ese combate psicológico de los principales actores de la política francesa y europea del principio del siglo XIX, como cosa curiosa y por el odio de la duquesa de Angulema me leí lo que pude en la wikipedia el motivo de esa aversión y yo si hubiera entrado en una sala con Fouché delante, pero para meterle una pica en las tripas.
Al final Fouché muere en Trieste en el exilio, cornudo -porque solo dos cosas parecen haber ablandado a este hombre frío en su vida, la muerte de su primera hija y el amor que le tiene a su mujer y que con su muerte parece enfriarle del todo-.
Creo que os he contado demasiado pero es apasionante lo bien contada que está la vida de este hombre, en una época tan apasionante y de una forma tan amena, no penséis que es una biografía pues no se pude considerar como tal, es un análisis perfecto de la mente de un hombre imprescindible, en el que se demuestran como las ambiciones políticas mueven a los hombres a hacer cualquier cosa por mantenerse en el sillón de mando, ¿os suena?.

domingo, 23 de septiembre de 2012

El Hombre que Quiso Matarme



Shuichi Yoshida
Ediciones Destino
ISBN: 978-84-233-2778-2

Al comprar la novela una de las cosas que me retuvo fue la comparación con Stieg Larsson que hacían algunos medios, pero creo que la comparación es irreal, ficticia y casi publicitaria, no porque los dos sean o dejen de ser dos buenos escritores sino porque aunque son dos thrillers psicológicos creo que Yoshida hace retratos de personajes reales que el difunto nórdico no hace; digamos que Yoshida hace casi un documental de personajes actuales con ese toque tan japonés que a mi me encanta, con detalles sutiles y tan individuales que puedes ver, respirar y sentir lo mismo que ellos.
La novela ha sido premiada y llevada al cine por si tenéis interés y en el enlace de la página oficial del escritos que he puesto podéis ver el dvd de la versión japonesa y lo deduzco por el pelo rubio del personaje principal. y no porque sea un maestro en traducir japonés.
La obra está llena de imágenes moralistas y algunas muy machistas, exactamente igual a lo que puedes encontrar en el Japón de hoy con la novedad de las relaciones personales a través de la red; seres solitarios que buscan como almas en pena el sentirse queridos y amados, tipos realmente aberrantes que su poderío económico les hace comportarse como déspotas y que a buen seguro no gozarán de vuestra simpatía y le daríais con llave inglesa que lleva el barbero en la cabeza, abuelos que a fuerza de doblar la cabeza tardan en encontrar el orgullo perdido, etc.,  de forma pausada y con viajes al presente y al pasado y de un personaje a otro, vas dibujando la trama y los verdaderos motivos de la muerte de Yoshino Ishibashi, una muchacha que vive una vida como comercial de seguros y otra como chica de compañía de una web de contactos, por medio de esa página de contactos conocerá a su asesino, un trabajador de la construcción que cuida más su coche que sus relaciones personales, Yuichi Shimizu, y que fue abandonado por su madre para que el se criase con sus abuelos en un pueblo de pescadores. La aparición de otra muchacha en la misma página pero con distintos objetivos, Mitsuyo Magome, brindarán a Yuichi descubrir su verdadero y terrible yo.
Es posible que en una segunda lectura -no suelo hacer segundas lecturas- se pudiese ver cierto vínculo con la primera relación de Yuichi y una masajista erótica con su madre, pero creo que en realidad buscar ciertas explicaciones lógicas a lo que nos pasa en la cabeza me parecen forzadas y rebuscadas, digamos que prefiero ver que si una cabeza funciona mal es porque un "engranaje" mental no va bien en lugar de echarle la culpa a otra cosa pues miles de personas -reales- sufren traumas más duros y siguen con sus vidas adelante, que conste que esto es una opinión personal y no una crítica del libro.
El detalle de los fantasmas del puerto de Mitsuse seguro que os recordará la leyenda urbana de la chica de la curva que hay en todas la carreteras peligrosas, el único matiz es que la aparición fantasmal aquí produciría oleadas de tinta de Iker Jiménez y en Japón sólo provocaría flores -y una bufanda, detalle hermoso y bello donde lo haya- en el lugar del asesinato de la joven.
Otros personajes que completan el plantel son los abuelos de Yuichi, los padres de Yoshino, la hermana de Mitsuyo, Keigo Masuo un estudiante sin problemas económicos, las compañeras Yoshino o de Mitsuyo o los compañeros de tajo de Yuichi son los que montan ese gran collage que es el asesinato de Mitsuyo pero a diferencia de otras obras donde se persiguen pistas, indicios, aquí prácticamente desde el principio sabéis quien es el asesino pero no los motivos y eso os tendrá atrapados hasta la última página. Es una gran thriller psicológico donde lo importante son los personajes, con problemas reales que te empapan y te hacen pensar, esas vidas solitarias y rutinarias cada vez se parecen más a las de todos nosotros.
A pesar de que hay un culpable claro y confeso, Keigo Masuo era merecedor casi del mismo castigo, la escena en la que echa del coche a Yoshino es de una crueldad infame y como se recrea de que el padre de la difunta le recrimine que la dejara allí tirada, suplicándole un perdón, una explicación ante sus amigos es terrible.
El último capítulo exigirá de vosotros vuestra mejor y mayor atención pues brinca de un personaje a otro, de un instante a otro y salvo que se esté atento es probable que creas que la llave inglesa la lleve el policía que detiene a Mitsuyo o que quien ha abandonado a Yuichi es su abuela en vez de su madre.
Si sois aficionados a los thrillers psicológicos hará que paséis una horas deliciosas de lectura, si os gustan las novelas descriptivas donde los personajes son lo más importante también, pero si os gusta leer el Marca o la sección de bolsa de color sepia del Expansión, pues buscaros otra.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Sombras en Fuga



Orson Scott Card
Ediciones B
ISBN: 978-84-666-4776-2

Otro mechachis, ¿será posible?, soy seguidor de la saga de Ender, libro que siempre recomiendo pues pienso que "El juego de Ender" supone un antes y un después a los libros de ciencia ficción como lo hizo la película "Blade runner", tomando como semilla de lo que supone una exitosa serie Scott Card creo un universo de personajes ya separados y con vidas independientes de esa primera novela, por una lado Bean y por otro Ender, los dos genios de la escuela de batalla contra los fórmicos pero si los inmediatos libros posteriores fueron casi tan buenos como el primero, este último te deja frío como una lechuga, buscas por todos lados la genialidad de Bean y no aparece más que en pequeños trazos, ves recursos repetidos como esa extraña "trinidad" tan común en la vida de Ender pero ahora con los tres hijos del gigante -Bean-, lo único novedoso que nos trae la novela es que con la posible solución de la enfermedad de gigantismo e inteligencia extrema de los hijos de Bean se abre un nuevo mundo de posibilidades y más estando tan separados de los humanos "normales".
Para mi que me ha gustado esta serie de novelas son casi todo pegas, todo me es demasiado familiar y no descubro prácticamente nada nuevo, lo único nuevo es la forma de ver la relación de los fórmicos con la reina madre, relación desconocida para los humanos pues todos tienen la imagen que les ha dejado la sombra de los muertos -Ender-, los hijos son copias de personajes ya conocidos pues Ender, Carlotta y Cincinnatus son "iguales" que Ender, Valentine y Peter -por eso de la trinidad que decía antes-, en ellos no aprecias ninguna de la virtudes de su gigante padre, un padre que parece más ausente que otra cosa y personaje por el que sentías empatía en cualquiera de sus anteriores novelas, empatía que ni sus hijos sienten cuando ven que llega el final, solo sientes empatía precisamente por el personaje ya conocido de Bean Delphiki en sus desvelos por cuidar de sus hijos cuando está prácticamente impedido por culpa de su gigantismo.
La nueva relación de los fórmicos con estos nuevos seres "humanos" puede dar para un posible encuentro cuando Ender consiga encontrar un lugar adecuado para su huevo de reina madre y sería interesante ver como se verían estos nuevos seres con una reina dictatorial que ejecuta a una obrera cuando ya no le es útil.
Los tres hijos de Bean son los principales protagonistas de la entrega, cada uno con una característica y ocupación que les hace complementarios y menos mal que se dan cuenta, pero ninguno de ellos llega a la genialidad del padre, mientras Ender -puesto en honor a su amigo Ender- se encarga de los estudios de la cura del gigantismo y su prematura muerte, Carlotta -en honor a la monja que salvo a Bean de morir en las calles- se encarga de los temas mecánicos y técnicos y Cincinnatus -en honor a un general romano que después de terminar la guerra se volvió a arar sus campos- los asuntos defensivos. Pues ninguno de ellos en su totalidad es "completo", ninguno te empapa para que le mires con simpatía o antipatía y eso nunca me había pasado con otros personajes de Scott Card por eso pienso que es con creces la novela más floja de todas las que he leído de la serie.
La trama, lenta, muy lenta arranca con un intento de eliminar al gigante, no olvidemos que aunque son críos de 6 años sus mentes son como de 25 años pero que no dejan de ser niños aún, un complot que es desmantelado por Ender, una vez informado el padre -el gigante Bean- les da una reprimenda paterna a los tres pues todos ellos fallan en algo y en esos instantes de crisis "familiar" los ordenadores detectan una anomalía próxima a un planeta de poca gravedad, una anomalía que resulta ser una nave fórmica llena de cadaveres y rajos (ratas-cangrejos) salvajes, en su análisis en profundidad de la nave encontraran unos pocos zánganos supervivientes que supondrán un giro en su intento de supervivencia, un giro para ambas especies.
No quiero aburriros con más pegas, a los incondicionales de la serie les gustará, pero seguro que no les dejará con regusto de querer más como en otras. Si queréis iniciaros en el universo de Ender, no empecéis por esta ni de coña.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Hielo Negro



Bernardo Fernández
Editorial Mondadori
ISBN: 978-84-397-2475-9

Bienvenidos al mundo del narcotráfico fronterizo, donde el valor de la vida de una persona es insignificante, estamos ante una novela ruda, dura, violenta, tanto que parece un cómic de Frank Miller no en vano Bernardo Fernández además de novelista es diseñador gráfico e historietista como dice la wikipedia. Para los que me siguen de muy de lejos recordarán que ya leí su anterior novela "Tiempo de alacranes" que es una novela bestial y genial y que sirve de pie a esta que curiosamente no está editada por el primer editor.
Las primeras páginas pueden resultar difíciles por el lenguaje fronterizo pero no creo que supongan ningún problema para las mentes abiertas y despiertas que pululan por este blog y que son todas, desde el principio esos giros  güey, naco, nomás, chingada te meten en un escenario sangriento y brutal que te hacen pensar que puede pasar por la mente de estos protagonistas para valorar en tan poco a sus semejantes y te acuerdas de las primeras crónicas de los españoles al respecto de los sacrificios aztecas, pero me parece que me voy a meter en camisa de once varas.
¿Cómo será el México de hoy para que tengas esta imagen tan brutal?
La novela está premiada con el premio de novela de Grijalbo de 2011 y lo merece con creces.
Con una lenguaje más propio de la novela gráfica, te lleva a escenas llenas de muerte, psicotrópicos, laboratorios de meta, raves o reuniones de capos en discotecas; el éxito de esa forma de escribir está en tratarlo precisamente como un cómic, una escena un capítulo, repleto de detalles muy visuales; no quiero decir que el escritor se recree en la violencia extrema que llevan como marca los narcos mexicanos, es que te la describe con tanto detalle que la ves, la respiras, la vives y lo que es mejor/peor, la sientes.
La novela se centra en dos personajes principales, dos mujeres, cosa extraña en este género, por un lado la hija de un antiguo capo y jefa del cártel de Constanza, Lizzy Zubiaga -algunos es fácil que tracen paralelismos con la novela de Pérez Reverte de "La reina del sur"- que quiere dejar el mundo de la coca colombiana para dominar las drogas de diseño y más concretamente crear la superdroga hielo negro; esta guapa narco se encontrará de frente y por un asesinato encargado con una mujer policía, grandota, robusta, dura, fuerte, Andrea Mijangos que busca la venganza por ese asesinato que detallaba, el de su compañero y amante.
Fernández perfila una narco elitista, no se mezcla con los consumidores, presume de arte y unas piezas de arte precolombino servirán de detonante para el fatídico encuentro. Cuando se encuentran y se enfrentan ves las dos caras de las dos, como se complementan, como se necesitan la una a la otra.
A la mente te asalta la duda de si en las famosas fiestas de Ibiza no correrán estas drogas con total impunidad y no creo que sea por dejadez policial.
Unos personajes secundarios pero a su vez imprescindibles completan la "tripulación" de esta novela, desde el  "médico" un tipo cruel, salvaje, Armengol el policía amante de Andrea y que es el único que la mira y la desea como mujer hasta los guardaespaldas de la misma Lizzy, que es mejor dar de comer en otra mesa.
Es una novela bestial, impresionante y que me ha gustado tanto como "Tierra de alacranes" y que os recomiendo vivamente.