lunes, 30 de julio de 2012

Los Simpson y la Filosofía



William Irwin, Mark T. Conard, Aeon J. Skoble
Editorial Blackie Books
ISBN: 978-84-937362-0-0

Y por fín llegó mi cuota de autosadismo de esta temporada, debí estar loco cuando abrí la primera página de este libro para leerlo porque es imposible que no tenga algún trauma futuro o alguna embolia oculta que todavía no ha dado la cara, empecemos con que muchos de los capítulos son para aquellos que no olvidaron la filosofía o simplemente que les gusta -porque tiene que haber de todo en esta vida- y la tienen aún presente pero para todos aquellos que la dejamos muy atrás o más concretamente en nuesstros 17 añitos del antiguo COU pues habrá partes que les superarán por la derecha, la izquierda, arriba y abajo porque no te enteras ni del NO-DO por mucho que quieran ayudarte con ejemplos de fácil comprensión, bueno, o eso o yo soy un completo idiota porque estoy seguro que si me vuelven a explicar las curvas de Euler Savary de cinemática me enteraría un poquito más.
Aunque he citado tres autores en realidad son muchos más y cada uno apoyándose en la famosa serie de la TV plantea algunos dilemas, unos con mejor fortuna que otro porque aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid se ponen hablar de lo que piensan los personajes y lo que dicen los distintos filósofos o corrientes de pensamiento; me parece un exceso y no dudo del intelecto de los guionistas pero adjudicar ciertas verdades morales a los personajes me parece un desbarre mental solo fruto del calor de esta época porque la serie de TV o yo soy imbécil y no me he dado cuenta y me parezco en demasía a Hommer, es un mero entretenimiento y punto.
Con 21 sesudos pensadores y sus análisis si consigues que vuelvan a gustarte la serie es que debes ser masoca y por eso he dicho que he cubierto mi cuota de autosadismo de este año. Creo que con todo, una parte muy interesante son las ideas de la parte final del libro y en las que se inspiran los diferentes capítulos de las misma, pero solo es eso, interesante.
Otro hándicap importante es que para refutar algunos de sus postulados menciona series de TV que muchos de nosotros no conocemos o bien por antiguas o porque nunca pasaron del cable y de emisión solo en USA, otras si son reconocibles pero son las menos.
El orden de dificultad de comprensión va de menos a más, es decir que los capítulos primeros tomando como base a los filósofos primitivos son los mas "sencillos" de digerir pero lo que digo con digerir no es compartir o entender.
En los diferentes capítulos se ven nombres tan comunes ya para nosotros como Burt, Hommer, Lisa, Flanders, etc, y por el otro lado Marx, Arsitóteles, Nietzsche, Kant, Sarte u Ortega. No puedo decir que capítulo me ha gustado más pues podría hacerse ya que está escrito por pensadores distintos pero por culpa de mi mínimo nivel a lo mejor no puedo señalar ninguno de ellos.
Dividido en cuatro partes principales y bien diferenciadas en la primera de ellas se ve el comportamiento de los personajes a través  de las diferentes corrientes filosóficas -Hommer con Aristóteles, Marge con Confucio o Burt con Nietszche y todo ellos con muchas referencias literarias que "ayudan" a esa comparación-. Las segunda parte aborda los temas que toca la serie que no son ni más ni menos que los temas actuales, es aquí donde las diferentes series con las que es comparada puedan ser recordadas o no. En la tercera parte nos muestra como ha ido cambiando nuestro mundo pero siempre sin dejar refutar sus ideas con los diferentes personajes de las serie  y por último, en la cuarta y retorcida hasta decir basta y que por mucho que se emperren infumable, la de explicar las diferentes corrientes o pensamientos modernos de algunos pensadores pero sin alejarnos de los personajes, a tenor de lo que os cuento seguro que deduciréis que las tres primeras partes son más fáciles de digerir que la última y que al leer esta última me ha dejado "pal´arrastre" y es posible que esa parte final me haya influenciado tanto y no lo negaré por tanto como para decir que no hay que digiera este libro; pero como me ha dejado semejante dolor de entendederas que si tuviese un juzgado cerca e hiciese menos calor iría a ponerles una denuncia por fastidiarme una preciosa tarde de verano, esperemos que una buena sesión de natación me despeje la cabeza y no me refiero a una sesión sentado en el sillón.
En fin, creo que es un libro solo para iniciados y nunca para seguidores de la serie por mucho que lo digan algunos.

miércoles, 25 de julio de 2012

El Abuelo que Saltó por la Ventana y se Largó



Jonas Jonason
Ediciones Salamandra
ISBN: 978-84-9838-416-1

Un libro sorprendente y creo que es la mejor forma de empezar, sorprende por infinidad de motivos el primero de ellos es que acaba con el tópico de los escritores nórdicos pues parece que solo saben escribir novela negra -y según mi "particular y raro" parecer, todos muy parecidos-, que siendo un libro tan divertido esté escrito por un tipo al que le da el sol seis meses del año y su termómetro no pasa de los 20 grados positivos, la foto de la portada que ya casi echa para atrás o ese título tan largo, que siendo un éxito de ventas debo ser el primero de los blogs de libros que más o menos piso que publica algo sobre él pero que seguro que muchos han visto o han estado tentado de leerlo, que pueda mezclar a tantos personajes históricos sin que se le escape una mala cara, etc., etc., etc.
Es una novela muy amena, muy fácil de leer que te va llevando de una situación a otra cada vez más inverosímil y que por momentos puede recordar al Eduardo Mendoza de su última novela; yo creo que cuando Jonason se sentó a escribir la novela no pretendía nada más y nada menos que el lector se lo pasara bien, ni más pretensión que esa y lo consigue con creces pues derrocha ingenio en todas y cada una de las situaciones que plantea -Dios, la narración de los hechos al fiscal es para morirse- y relata una vida emocionante y divertida a la que te transporta entre sonrisa y sonrisa, digamos que es una novela veraniega ideal pues no te deja la cabeza como un bombo para que le estés dando vueltas al sentido de la vida o la prima de riesgo. 
El libro se vino conmigo en la feria del libro de este año pero desde entonces he oído hablar de él y lo estaba dejando un poquito para después, las expectativas eran altas y no me han defraudado pero teniendo en cuenta lo que pretendía hacer, que no es nada más ni nada menos que entretenernos.
El protagonista de nuestra historia es un anciano centenario que está hasta las narices de vivir confinado en la residencia de ancianos a la que se ha visto obligado a ir tras la venganza de la muerte de su gato a manos de un zorro -la culpa es suya y su ataque de ira, el primero de toda su vida-, agobiado por no poder echarse un trago y esa es una cosa que puede chocarnos a los que no bebemos, pues parece ser que no debes fiarte de uno que no bebe como decía el padre de Allan Karlsson nuestro protagonista -aunque la madre dice lo contrario- y como parece "demostrar" a lo largo de toda la obra; mientras le preparan su fiesta de cumpleaños a la acudirán todas las fuerzas vivas del municipio, Allan se fuga, pero se fuga por la ventana, en pantuflas y completamente a la aventura, tal y como ha sido toda su vida pues Allan Karlsson nunca ha pensado las cosas antes de hacerlas y va a parar a la estación de autobuses donde un joven le pide que le guarde la maleta mientras acude al WC, como el joven tarda y el autobús de Allan va a salir pues ni corto ni perezoso se sube a él con la maleta, una maleta llena de billetes de 500 coronas suecas y que serán el origen de una persecución endiabladamente divertida a la que se van sumando personajes y se intercalan episodios de la vida personal del Allan, una vida endemoniadamente curiosa y divertida que le llevará a conocer a Stalin, Truman, Franco, De Gaulle, Mao y su esposa, etc., que se convertirá en agente de la CIA o el eslabón clave en el proyecto Manhattan de la construcción de la bomba atómica.
Los distintos personajes históricos ridiculizados o humanizados según se quiera ver serán claves en la propia vida de Allan y desmitificará a tipos envarados de los que más vale no fiarte, puestos creo que el único que libraría de la quema sería Yuli Borisovich pero prefiero que descubrías vosotros el por que.
Puestos a ponernos filosóficos y por tratar de sacar más jugo a la novela creo que puede hacernos reflexionar en si hemos aprovechado nuestra vida y si la edad real la llevamos en la cabeza y no en las arrugas de la piel, pero si no queréis hacerlo -me refiero a poneros trascendentes- pues tampoco pasa nada, pero seguro que sacáis alguna cosa interesante de su lectura, yo de momento os apunto algunas a modo de pincelada: todos nos sentimos solos hasta que alguien te llama amigo -inspector Aronsson-, el amor no depende de tu capacidad de raciocinio -Allan y Amanda, Herbert (el hermano de Einstein) y Amanda antes-, el amor puede llegar en cualquier momento -Benny y la bella dama-, Suecia no es el mejor sitio para un elefante, no puedes crear una banda de mafiosos con tres pardillos (Gädan y sus Never Again), sin sexo es posible llegar a los 100 (jaja), y muchas cosas más, no quiero destrozaros un agradabilísimo rato de lectura.
Dejaros guiar por el sentido común de Allan Karlsson, alguien que sabe vivir y lo contagia.
Muy recomendable.

sábado, 14 de julio de 2012

Los Idiomas Comunes



Laura Casielles
Ediciones Hiperión
ISBN: 978-84-7517-976-6

Todavía me estoy reponiendo del orgasmo mental que he "sufrido" leyendo a esta joven poetisa ovetense, no se me puede olvidar dar la gracias a la tatuada dependienta de la caseta de Hiperión de la feria del libro de Madrid de este año por recomendármelo porque ha sido fabuloso, es más, yo de mayor querría escribir como Laura Casielles, si alguien sabe donde se rellenan los formularios que me avise.
Este libro está premiado con el decimotercer galardón de poesía joven "Antonio Carvajal", pero esto es anecdótico salvo por lo que lleva dentro escrito que es mucho y muy bueno, es su segunda obra y voy a tratar la localizar la primera "Soldado que huye" porque de veras que estoy encantado de que haya caído en mis manos.
Para un poestastro de tercera regional como yo el que puedas leer poesía de este calibre te hace sentirte un torpe de campeonato pero por otro lado también te sirve de acicate para mejorarte porque Laura Casielles escribe como a mi me hubiera gustado hacerlo o lo expresa como a mi me hubiera gustado hacerlo, con algunas diferencias obvias por descontado; pues es una obra que versa sobre nuestro entorno y lo que nos rodea que es mucho y a veces muy duro y áspero -leer el poema "Vecindario"- , nuestros amores y cuando hablo de amores olvidaros de poemas cursis de "me duele el corazón" o me "brinca como una patata", lo mismo da, porque se puede hablar de sentimientos sin parecer un merengue pasado y Laura Casielles lo consigue -por ejemplo y por citar un formidable poema "Las mujeres que escriben diccionarios tienen la mano llena de notas"-, sobre nuestros sueños o deseos -en por ejemplo "Haiku largo e inconcluso"-, ¿qué hace atractiva su lectura para mi? quizás que lo estructura como una historia, que te cuenta algo que no es preciso estar en un momento especial tu vida para sentir empatía por lo que lees, que son cosas cotidianas -"Acción de gracias" por ejemplo-; la poesía nunca debería ser una mezcla de palabras obtusas y de obligada búsqueda en un diccionario o ni si quiera una colección de metáforas imposibles, la letras son elementos de comunicación para expresar cosas y podemos usarlas de buenas maneras -es que estoy pensando en el bochornoso espectáculo del congreso de los diputados del otro día y su poca catadura moral- para alcanzar cotas loables y dignas porqué para no hacer algo como eso lo mejor que podríamos hacer es estar callados y de ahí la importancia que la misma poetisa da al uso de las mismas -ver poema "Primera conjugación"-.
De esta obra sorprenden hasta los títulos y ya os he citado algunos de ellos, pero es que toda la obra es sorprendente porque expresa como los mismos ángeles como le preocupan las cosas y he aquí lo que hace que te sientas tan próximo, es que se parecen tanto que bien podrías decir que has estado hablando de esto anoche mismo con tu mejor amigo/a o que te has ido a la cama dándole vueltas a eso mismo.
Yo más que la enhorabuena a Laura por su premio le daría las gracias por regalarlos un libro de este calibre y lo mejor de todo es que al leerlo no os quitará el sueño, todo lo contrario, vuestro descanso será plácido y relajado pero eso si, después de leerlo, jeje. La semana que viene me caen ya 45 castañas y con este libro me ha llegado mi primer regalo, gracias Laura porque sin conocerte de nada en absoluto es como si hubiese perseguido tus poemas toda mi vida.

jueves, 12 de julio de 2012

La Edad de la Duda



Andrea Camilleri
Ediciones Salamandra
ISBN: 978-84-9838-459-8

Última entrega de mi admirado siciliano de la serie del inspector Montalbano, a estas alturas no se va a sorprender nadie cuando diga que me encanta este casi nonagenario escritor y los motivos son muchos, sus personajes son personas casi "reales" que les gusta vivir y disfrutar de la vida, ya sea con las relaciones personales como con la comida y en este punto casi se podía hacer un estudio gastronómico porque cuando lees las novelas de la serie de Montalbano babeas cuando entra en la trattoría de Enzo, son personajes sin traumas raros o taras mentales que tanto abundan en los libros de novela negra nórdica, no se recrea en la violencia clásica de los textos policíacos y así podría seguir hasta casi el infinito; todo esto de forma genérica, de forma particular esta novela me parece un poco más floja que anteriores entregas y no es porque me encuentro cansado del personaje, se ve una evolución lógica de madurez y vejez de Salvo llegando a la edad  difícil de los 50 y le notas trazas de viejo verde que no me gustan pero que ves en personas de esas edades -y de algunos menos- eso en si no es una pega pues hace creíble al personaje, lo hace cercano lo que no me ha gustado ha sido como ha resuelto el final; el desarrollo de las pesquisas están perfectas es el final personal el que no me dejado ese sabor de boca delicioso que me suelen dejar otras obras de Camilleri.
La novela arranca con un sueño truculento que tiene el mismo inspector en el que se ve muerto, un deceso al que no irá ni su propia novia -Livia- para sentirse libre para desaprovechar la oportunidad y ese sueño le perturba sin entenderlo y de esa manera arranca su día, un día que empezará a torcerse con la llegada de un lujoso velero que trae el cuerpo recogido en alta mar; un cuerpo desfigurado y sin identificación que será el primer eslabón de un caso de tráfico de diamantes en los que se verán involucrados la ONU y una misteriosa "sobrina" de la patrona del lujoso yate, la armada italiana y la preciosa oficial Laura Belladona que supondrá un posible error en la vida personal del dottore y por la que es correspondido a pesar de saber que es un error -creo que ese canto de cisne del hombre maduro está deliciosamente retratado y es lo mejor de la novela-, la policía francesa y los siempre presentes Fabio, Cattarella -es desternillante, no sé como pasó el examen de policía o sus siempre protestones jefes superiores.
La capacidad de Salvo no se verá perturbada pero si su saber estar por culpa de la bella Laura y le traerá también más de un disgusto, incluida la pobre Livia; es interesante ver como le molesta que Mimí llamé así a a la patrona rica del yate en coincidencia con la novia del Salvo, como si tuviese cierto remordimiento de su no relación con Laura; Salvo se hace mayor porque ya es mayor y eso si hace la serie grande porque no sería creíble ni bueno que se comportase como el Salvo de "El perro de terracota" por ejemplo, ese hecho de que los hombres maduros ven pasar lo que puede ser un último amor y las tonterías que pueden llegar a hacer está perfectamente descrito. Me temo que el genial Camilleri tiene en mente ya el final de Montalbano pero mientras llega o no llega, disfrutemos de estos ratos tan lúcidos, de esos platos de comida guardados en el horno o de sus visitas a Enzo.
Insisto en que es más flojo que otras entregas pero no por eso deja de ser interesante, la trama te atrapa, es ágil y por momentos casi parece una entrega de humor -la historia de su esguince o la corona de flores por la "muerte" de su hijo enfermo- y para los amantes de este enorme escritor es obligatorio pero si te vas a acercar por primera vez a su obra, yo probaría con cualquiera de las anteriores, es inteligente en el desarrollo y en la conclusión pero que donde falla es en lo que siempre me ha gustado de él, en su cercanía de los personajes, en como lo cuenta, en como sienten, en como viven, a lo mejor es que no quiero que envejezca el sagaz Salvo.
Es una buena novela para este veranito.

sábado, 7 de julio de 2012

Tú y Yo



Niccolò Ammaniti
Editorial Anagrama
ISBN: 978-84-339-7836-3

Tras su exitosa "Que empiece la fiesta" que tanto me gusto me sumerjo en esta segunda novela de Ammaniti editada en España por Anagrama y con un giro bestial, un giro que demuestra que este tipo sería capaz de escribir prospectos de medicinas y hacerlos dignos de un premio literario; creo que he leído uno de los libros más bellos de mi vida, muy melancólico, doloroso y conmovedor donde la soledad es un personaje más y las rarezas de la gente hacen que te mires en un espejo y medites en que lugar se encuentra la "verdadera" rareza.
Todos de adolescentes hemos pensado y deseado que nos dejen en paz -y no solo de jóvenes, ¿verdad?- y en esos años de disparos hormonales, del trazo de lo que será gran parte de nuestra vida, de nuestros miedos, de nuestros deseos y sueños y tras ese tiempo si alguno tiene valor podemos hacer balance de ese periodo si es que el Alzheimer no nos tiene las neuronas hechas puré que todo es posible y podemos ver que ha quedado de todo aquello; lo difícil está en que un hombre nacido en 1966 pueda ponerse en la piel de un muchacho de esa edad tan complicada y hacerlo tan bien, con una escritura llena de sentimientos, sin adornos superfluos y terriblemente emotiva.
El protagonista de esta cortita obra es Lorenzo Cuni, un adolescente de 14 años con tremendos problemas para hacer amigos, introvertido, soñador y que adora a su madre -no busquéis un complejo de Edipo porque no es el caso-; Lorenzo dice en su casa que ha sido invitado a pasar la semana blanca esquiando con unos compañeros de clase que en realidad no se relacionan con él para alegría de su madre, prepara un plan para pasar esa semana encerrado en el sótano de su casa alejados de todos, se hace con comida -galletas, latas de atún y Nutella-, bebida -Coca Cola caliente o la cerveza que le roba al portero-, libros -novelas de terror- y videojuegos y comienza a pasar su tiempo de "libertad" hasta que recibe una llamada desconocida para él, una llamada de su hermanastra, una llamada que perturbará por completo su vida y su forma de ver a su hermana.
Algunas de las escenas os van a abrir las carnes, en concreto cuando la madre de Lorenzo tiene un encontronazo de tráfico con un energúmeno; a cambio, los desvelos de Lorenzo por su hermana Olivia mientras está sufriendo el mono es de una gran ternura y os reconcilia con el ser humano y también el encuentro con su abuela moribunda que todo lo contrario, ella no desea estar sola y le retiene todo el tiempo posible pidiéndole que le cuente una historia, cualquiera, la que sea.
Lorenzo al principio no sabrá que le ocurre a la hermana pero poco a poco lo va descubriendo y por ella estará dispuesto a poner en riesgo su plan de pasar desapercibido en su escondrijo y se creará un precioso vínculo de sangre y fraternal que se plasma en una pequeña nota. Las primeras páginas y últimas te meterán el frío en el cuerpo, un frío que se plasma en el blanco de los azulejos o en la mesa de la morgue y que te cala hasta que Lorenzo ve a su hermana.
No sabría decir porque encuentro precioso este libro porque es una historia muy triste, quizás porque te ablanda el tuétano o porque veo en Lorenzo acciones que me resultan familiares -sobre todo por la escena del arropado, de algo parecido no hace demasiado tiempo y cuando yo ya entonces no era un adolescente que se diga, la diferencia es que el que arropaba era el que quería ser "salvado" y no al revés-, solo sé que el libro es delicioso, que te hace pensar, que te muestra que la vida es más dura de lo que te cuentan cuando eres pequeño salvo que seas un enchufado con apellido ilustre, y todo sin perder un ápice de la inocencia que aún te queda mientras eres aún adolescente creyéndote todo lo que te prometen las personas a las que quieres.
Pd. haceros con pañuelos de papel.

jueves, 5 de julio de 2012

Casa de Verano con Piscina


Herman Koch
Ediciones Salamandra
ISBN: 978-84-9838-455-0

De nuevo bienvenidos a una novela que os arañará el alma y os envenenará, hace unos meses Herman Koch pasó por este espacio con su anterior novela "La cena", novela que hace que te arda la sangre y esta no es menos, quiero pensar que tanto una novela como la otra serían una difícil realidad en países "menos" desarrollados como los mediterráneos -espero que se entienda la ironía con eso de desarrollados- porque Holanda parece que siempre va un paso por delante en cuestión de derechos individuales y supongo que se debe a su pasado religioso separado de la hipocresía católica nuestra pero cuando cierras la última página de esta formidable novela esa imagen que tienes de avance no te parece tanto pues el remordimiento o el sentimiento de culpa del protagonista son tan "grandes" como las mías de ingresar en una orden cartuja.
Parece ser que forma parte de una trilogía burguesa por lo que he podido investigar al respecto pero sin relación entre las otras obras y/o personajes anteriores y de la que "La cena" es la primera de las obras.
Como en la obra anterior Koch no juzga a ninguno de los personajes de la obra en la que los papeles masculinos son dignos de un tratado de psiquiatría, desde un directos maduro o mejor dicho, un viejo verde casado con una mujer cuarenta años más joven que él que os recordará a Polansky, un actor de teatro que se tiraría hasta un tubo de escape de no estar demasiado bajo y un médico hipócrita que a los ojos de sus pacientes parece otra cosa y que no le temblará la mano de ejecutar a alguien porque le parece culpable de un terrible hecho que luego no es tal.
El médico Marc Schlosser y su familia son el eje principal de la acción, casado feliz y con dos hijas preciosas, adolescente una y prepuber la otra son invitados a pasar unos días en una casa en la playa con piscina en compañía de un paciente suyo, el famoso actor de teatro y cine Ralph Meier, antes de aceptar podréis ver como se comporta Marc con sus pacientes y en como los pacientes somos seres inferiores en manos de ciertos médicos y eso merece una reflexión aparte pero seguro que a todos os vendrá a la cabeza doctores de series de TV famosos y que tratan a los enfermos como coches de una cadena de producción en el mejor de los casos y como deshechos en el peor pero esto es una cosa más porque desde que empiezas a leer el papel de Marc se te hace antipático y todo porque sabes como piensa de verdad y como mira a los demás, no duda de su capacidad de analizar lo que les ocurre a sus enfermos porque "nunca" se equivoca y esa actitud prepotente y suficiente le hará cometer un asesinato y sobre un hombre inocente al que el cataloga como digno de no seguir viviendo porqué lo considera culpable de la violación de su hija; ya el colmo y por lo que le llevaría a la hoguera -un homenaje a mi admirado Crahe- es que cuando descubre que no es culpable y está muriendo no tiene un ápice de remordimiento. Y eso me hace cuestionarme de verdad cuando vuelvo cada año a ver a esos tipos de las batas blancas que tengo que visitar si me mirarán como lo hace ese pedazo de cabr** con licencia de recetar medicamentos, pero no es cuestión de cargar todas las tintas en el médico de cabecera, pues nadie es del todo inocente en esta obra, unos por unas cosas y otros por otras, todos -excepto Caroline la mujer de Marc, Emmanuelle, Lisa la hija pequeña de los Schlosser o los hijos de los Meier- tienen su cuota culpa o de maldad.
Vale que Ralph no es un tipo al que dejarías solo con alguna de tus hijas, pero las apariencias engañan, lo más sorprendente de toda la novela es el poco peso que tienen las mujeres, son protagonistas pero no decisivas, las hijas de Marc o su esposa, la mujer de Ralph o la misma Emmanuelle.
Lo que si es digno de apreciar es como refleja la difícil comunicación de padres a hijos, la hiperprotección de los hijos de hoy o el tránsito de la infancia a la adolescencia de esos chavales y en como ven o no ven eso los padres -atención que solo es en el papel masculino-, la diferente visión que tienen los padres de sus propios hijos -esto es igual a "La Cena"- o la hipocresía o el clasismo social, solo hay que leer la fiesta del estreno de una obra de teatro para ver como en realidad Marc es un acomplejado y en ver con que desdén trata a esos mismos que le invitan a estenos o presentaciones de libros, creo que sólo un paciente sabe como es de verdad y es un presentador homosexual que después de mandarle a tomar por culo en su primera consulta por lo mal que se sintió tratado vuelve porque sabe que realmente al doctor le importa un pimiento se politicamente correcto.
La novela tiene mucho que cortar, se podría sacar tajada de todo, desde como se comporta Julia -la hija mayor de los Schlosser- o el papel pasivo de las esposas de los tres varones maduros pero no quiero destrozaros el placer de descubrirlo; pero no esperéis que el autor se moje porque no lo hace en ningún momento, ni cuando le aplica la eutanasia al actor, la forma machista de ver a la mujer y las relaciones del médico y de uno de sus profesores, o cuando violan a su hija -aparentemente- o cuando piensa en engañar a su querida mujer con la esposa del actor después de seducirla vilmente; ese cinismo y esa frialdad puede que guste en Holanda pero a mi me ha puesto enfermo y me ha cabreado de mala manera, ojo que estoy hablando de sensaciones de la lectura porque la novela es muy buena y engancha.
Creo que cuando cerréis la última página veréis a ciertos médicos de otra manera, a los adolescente de otra, a los directores de cine casados con casi adolescentes de las misma con la que los veis ahora casi seguro y a los fontaneros pues dependiendo de lo guapos o feos que os parezcan y de si sois heteros u homos -esto es broma evidentemente-.
Había reseñado algunas de las enseñanzas del profesor de Marc en la universidad pero lo he pensado bien de lo machistas que me parecían he decidido no insultar a la inteligencia de las personas que leen este espacio y que prefiero que se escandalicen cuando las lean; también había reseñado la "confesión" del Ralph cuando le va a administrar el medicamento con el que dará fin a su vida pero luego pensé en todas la mentiras que hemos contado a nuestros padres cuando hemos sido adolescentes y salvo que esta es una pasada no difiere en mucho de otras que he oído o conocido de personas no demasiado lejanas a mi.
En definitiva, creo que es una gran novela pero no esperéis paz a vuestro espíritu cuando acabéis pues no la vais a tener, todo lo contrario y por eso creo que es bueno, que nos hace plantearnos ciertas cosas, que nos revuelve la entrañas, no voy a decir que es un gran descubrimiento pues ya me acerqué a las letras de Koch y lo que si estoy seguro es que ese libro que falta de la trilogía y que seguro que me hará pasar un "mal" rato también caerá por mis manos.