Ernesto Mallo
Ediciones Siruela
web: www.siruela.com
ISBN: 978-84-9841-510-0
Que la editorial Siruela tiene una mano izquierda para elegir novelas negras no lo duda nadie pero es que esta es una auténtica joya, por cierto, es el tercero de la feria -parece noche de toros, jeje-.
Situada en la década de los 70 en la Buenos Aires de los militares golpistas y los desaparecidos, fusilados sin identificar, un comisario de policía sin inquietudes políticas tiene que investigar la muerte de un prestamista, algo que parece sencillo porque realmente lo es, se retuerce por la mano de fuerzas oscuras ajenas a él pero que controlan el poder en la Argentina de esos años.
No se si estoy influenciado por mi visita a tan deliciosa ciudad en el mes de febrero, pero es que me he paseado por sus calles de nuevo, he olido los olores de sus calles y de sus gentes, pero bueno, eso también es mérito de este escritor argentino al que no pienso perderle la pista.
Como todo buen Sherlock necesita un buen compañero y el inspector Lascano -el perro- tiene a su amigo y confidente el doctor Fuseli como acompañante de fatigas y la aparición de Eva, una simpatizante comunista que ha podido escapar de una redada, le da ese toque que toda novela negra precisa para ser majestuosa y formidable. Es más, es que hasta esos cigarrillos que lo matan por dentro y que imprescindible son en todo personaje del siglo pasado se mascan y respiran
¿Qué es lo que me ha encandilado de esta novela? pues que los buenos no siempre ganan, que siempre hay un perfecto cabrón -perdón por el palabro- que se cree que es mejor y más que tu para decidir y me imagino que esos años de Argentina fueron así, donde jueces, militares y colegas se tapaban unos a otros entonando la palabra justicia, SU justicia, una justicia injusta que me revuelve las tripas.
Gracias a mi querida argenta, mi amiga Alejandra, no he tenido que dejarme los sesos para saber que era eso de rusos por ejemplo o para imaginarme de nuevo paseando por esas calles detrás de Lascano haciendo sus pesquisas, imagino que supuso para tan bella tierra la diáspora que tuvo que soportar fruto a los salvapatrias que se creían en la posesión de la verdad absoluta.
A pesar de ser un escritor argentino no temáis sus giros lingüísticos porque no tienen ningún problema, quizás os llame la atención la forma de exponer los diálogos, pero bueno, es una forma diferente a como nuestras metódicas cabezas están acostumbradas pero no tiene porque ser la única.
Espero que haya más novelas con este genial escritor y este especial comisario.
Así que ya sabéis, OBLIGADA para los amantes del buen género negro.
Angel te has pensado ya lo del reto de los diez misteriosos, lo digo porque tienes autores muy buenos y seguramente distintos a los que nosotros podamos aportar, y sería una delicia contar con ellos... Le sigo la pista a esta novela y a este autor. Me gusta Siruela... y soy una forofa de la novela negra, de la de verdad eh, que ultimamente me la adulteran con todo narices...
ResponderEliminarA diferencia de RBA que ha tirado hacia tierras más frías para autores de novela negra, Siruela tira más de escritores de la lengua de Cervantes -cosa que creo que es un acierto-, creo que sería un acierto el que la serie -la del inspector Lascano- acabara con esta novela, pero es una apreciación personal para darle ese toque negro y canalla que yo busco en la novela negra.
ResponderEliminarAl amparo de esta nueva predilección lectora por la novela negra creo que algunas editoriales están abusando y nos catalogan como negra, todo aquello que esté escrito con letra Times New Roman y salvo que llevemos buenas referencias podemos tragarnos cada sapo que más nos valdría habernos leído las páginas amarillas aunque alguna vez se cuele alguna joyita como esta de la que he escrito.
Me pensé lo del reto querida Carmina y sigo en ello, ahora es un mal momento porque le dedicaría poco tiempo y si me pongo necesito emplearme a fondo; las vísperas de verano siempre son una locura y mis días se recortan en tres horas por lo menos. En la feria precisamente compré dos más pero que los espaciaré porque no quiero dejar desatendido a mi querido Murakami mucho tiempo y sobre todo con ese libraco que es 1Q84 y que tanto promete.
Muchos besotes.