sábado, 24 de marzo de 2018

Godos



Pedro Santamaría
Ediciones Pàmies
web: www.edicionespamies.comwww.pedrosantamaria.com
ISBN: 978-84-16970-27-8

Pedro Santamaría ya no es un prometedor escritor de novela histórica en España, es una sólida realidad, un escritor maduro y asentado que no en vano fue galardonado en 2016 con el premio al mejor autor español de novela histórica por la  web Hislibris, yo ya he leído varios libros suyos y confieso que me gusta como escribe, tiene además la virtud para mi gusto de situar sus tramas en momentos históricos interesantes pero no tan trillados y la batalla que marcada como uno los momentos claves del fin del imperio romano, Adrianópolis, es uno de esos momentos interesantes que se salen de los Idus de marzo de los que hay mil y una novelas o los primeros años del imperio tras la desaparición de la república.
Con dos focos de atención en la narración, el lado romano y el lado godo, la trama se vuelve ágil y amena y no decae lo que hace atractiva su lectura y atrayente, sin pretensiones históricas nos narra una historia posible y si te apetece profundizar te da las claves para que puedas saber quiera el emperador Valente, los hunos o Fritigerno.
Estamos en el siglo IV, el imperio ha sido dividido en dos recientemente y las tribus bárbaras empujadas por las campañas de los hunos tratan de buscar refugio en ese imperio donde las casas son de piedra, donde el emperador da pan al pueblo y donde el agua surge de la fuentes sin freno; los godos son uno de esos pueblos que huyen de los hunos y tras pedir permiso al emperador Valente cruzan el Danubio ayudados por las tropas imperiales y un joven ingeniero, Paulo, con la esperanza de repoblar Tracia y generar riqueza para las arcas del imperio con los impuestos y proveerse de soldados para sus ejércitos que cada vez menos numerosos deben hacer frente como siempre, a los peligros que le vienen del este.
El emperador en la lejana Antioquía al principio ve con buenos ojos la llegada de esta sangre fresca para el imperio, pero con lo que no cuenta es con avidez y excesos de sus propios hombres que extorsionan al pueblo godo recién llegado no dejándole más solución que sublevarse para que el emperador cumpla su parte del pacto.
Pedro Santamaría nos mostrará esos años con los primeros conflictos religioso y las herejías que aparecieron en esos años, la lucha de la iglesia de Nicea y la Arriana, para darle un tono más humano la pareja de Paulo el ingeniero imperial, Alexandra, es atrapada por una patrulla de godos en la que se encuentra el joven Arnulf, mujer de fuertes convicciones religiosas verá puesto su mundo patas arriba y tendrá que plantearse absolutamente todo desde el principio mientras siendo esclava de estos bárbaros y siendo forzada por el mismo Arnulf, comprobará si sus convicciones religiosas son tan fuertes como ella creía cuando estaba en Costantinopla criada entre seda y perfumes.
La pléyade de personajes de la novela la dan una consistencia notable, para mostrar la corrupción de la frontera el papel de Lupicino es fundamental, del mismo modo y a modo de discusiones bizantinas, los diferentes asesores del emperador dan ese toque tan fácil de comprender de que "cada uno acerca el ascua a su sardina" y como fondo una batalla real en la que fue calificada como el segundo desastre más grandes de las armas de Roma después de Cannas. Con la desesperación como arma los godos no tenían mucho que perder salvo la vida en Adrianópolis por lo que el emperador Valente no supo ver que esa desesperación jugaría en su contra a pesar de contar con un ejército infinitamente mejor preparado y equipado, pero ya se sabe, lo dijo Napoleón que no hay plan de batalla que aguante más que el primer embate.
La novela es interesante en muchos aspectos, el primero es comprobar como la religión ya corroía los poderes del estado -y eso que empezó con el emperador Constantino solo unos años antes-, el sentir como los cimientos del entonces más poderoso imperio de occidente se pudría poco a poco y sin posibilidad de arreglo, que es muy difícil ponerle puertas al mar y a la desesperación humana cuando te empuja el hambre o la guerra y de eso debemos tomar muy buena nota y si todo esto no es suficiente, ¿no os apetece ver como se transforma un hombre justo y cristiano en un asesino cruel y desesperado?, pues no perdáis más tiempo, tenéis una cita con Paulo y Alexandra, con Valente y Fritigerno, con Arnulf el fiero y su hermana Brunilda o con la caballería pesada bizantina los catafractos y las hordas godas.

domingo, 11 de marzo de 2018

Próxima estación, Atenas



Patros Márkaris
Tusquets Editores
ISBN: 978-84-9066-508-4


La última novela de Petros Márkaris no tiene nada que ver con el personaje creado por el mismo escritor, el comisario Kostas Jaritos, editada allá por el año 2010 es una interesante forma de enseñarnos la ciudad de Atenas, siguiendo la línea más antigua del metro de la ciudad de Atenas conoceremos de una forma muy personal e íntima los rincones que nunca veremos como turistas, los locales que ya no conoceremos porque ya no existen o los que si existen pero que ya no son como antaño y que solo guardan quizás el nombre por motivos familiares o simplemente comerciales.
En apenas doscientas páginas, Márkaris nos contará como ha evolucionado la ciudad, como recibió las diferentes oleadas de inmigrantes griego expulsados de Turquía u otros lugares y como se adaptaron a la ciudad y el país dejando su sello, no en vano el mismo Márkaris es uno de estos hombres que nacido en Estambul tuvo que ir a una Atenas desconocida expulsado por las circunstancias, que estudió en Alemania y Austria para luego volver a Grecia.
Pasaremos por los barrios creados a finales del siglo XIX por la reciente monarquía tras la independencia de los turcos, los barrios de la nueva burguesía o los barrios más humildes y lo haremos pero no como en una guía de viajes, no, lo haremos como nos lo contaría un amigo que ha nacido allí, con comentarios como "allí se comía el mejor helado de la ciudad", el feo hormigón de las calles, la bonita luz del atardecer de Atenas, la dignidad de la pobreza cuando le das unas monedas o donde es obligatorio comer bacalao con salsa de ajo (puf son las 11 y estoy salivando).
Vamos a pasar y nos bajaremos en las diferentes paradas del "eléctrico", saliendo desde el puerto del Pireo, con sus casas de marineros que han ido desapareciendo fruto a la pérdida de importancia del tránsito naval griego (el golpe del canal de Suez debió ser terrible) y como ahora solo son griegos los capitanes porque el resto son tripulantes del sudeste asiático, pasando por el centro de la vieja y "fea" Atenas o los barrios ricos de Kifisiá, con sus altas torres de oficinas que crean una microciudad donde si no quieres salir de allí para visitar Atenas no lo harás nunca porque te "ofrece" todo lo que la vida moderna puede demandar.
Como en todas la obras de Márkaris, su toque de crítica social es evidente, ver como habla de los inmigrantes y como les exonera de toda culpa en la degradación de los barrios, responsabilizando únicamente a los atenienses de dejar a su suerte barrios que se estaban degradando y como fueron ocupados por esos inmigrantes porque era lo que podían pagar peor no porque la llegada de ellos hiciera que bajaran los precios.
Nota por si alguien me lo puede aclarar: ¿por qué ahora se ha puesto de moda la palabra migrante y no se usa inmigrante?, ¿vamos a asistir a otra expresión como entreno en lugar de entrenamiento?
Un libro interesante que a los viajeros a buen seguro les parecerá original, que les llevará a sitios recónditos y ajenos a las guías de viajeros donde el reloj del tiempo se ha quedado parado o para nuestra desgracia, es solo un decorado de lo que fue hace mucho, mucho tiempo.

sábado, 10 de marzo de 2018

Miedo




Stefan Zweig
Editorial Acantilado
ISBN: 978-84-16748-96-9


Ya sabéis que soy un enamorado de la obra de Zweig pero en esta ocasión no se si fruto del 8M y lo digo en serio, este corto relato no me ha arrebatado lo más mínimo; creo que si el final hubiera sido otro me habría rendido como siempre de forma incondicional a la pluma maestra del genio austríaco pero es precisamente ese final redentor el que no me ha conquistado, tanto es así, que hasta me ha parecido paternalista y protector y con un toque machista y condescendiente.
Aunque nacido en el final del siglo XIX sus obras coincidieron con una de las etapas más interesantes de la historia, los primeros 50 años del siglo XX, narró maravillosamente la decadencia de una élite, la aparición de los fascismos en Europa o la desaparición del imperio austro-húngaro, su forme de entender la relaciones humanas casan muy bien con su consecuente forma de vida y como le dio fin a esta en la lejana Brasil, a la que salió huyendo después de la deriva que estaban tomando las cosas en su patria y su hermanamiento con el nazismo.
Miedo es una novela corta o casi mejor llamarla relato donde una joven y bella dama de la alta burguesía vienesa, Irene, tiene una aventura extramarital con un joven pianista; en su matrimonio no es infeliz, es madre de dos hijos pero le falta vivir la vida y es lo que hace en esos encuentros con el joven pianista y que la hace revivir sus fantasías amorosas de juventud con un actor que nunca pudo realizar porque como ella misma confiesa ni está enamorada del pianista, es mera pasión carnal lo que les una, justo lo que no le da su esposo en su vida matrimonial; de lo que leemos no podemos decir que su marido sea mal esposo, jurista de éxito que la trata de forma correcta y con el que tiene una convivencia acorde a los años en los que está narrada la historia. Un día cuando sale de uno de sus encuentros amorosos con su joven amante es abordada por una mujer y esta la recrimina que le ha quitado el novio y la extorsiona para no hacer pública esa relación a lo que Irene responde pagando sin poner más trabas.
A partir de ese punto la vida de Irene se convierte en un infierno, los chantajes son cada vez más altos y ella duda entre decírselo a su marido o no y vivir esa vergüenza o seguir con los pagos aunque ya haya dejado de ver al joven, su miedo y su angustia la mina por dentro, a pesar de la oportunidades que le da la propia vida de abrir su corazón a su esposo -cosa que como luego se verá es una mera "trampa" propiciada por el mismo-, es ese miedo el que la llevará por el camino más corto y tratar de poner fina su vida, ya no piensa en sus hijos a los que descubre como verdaderos extraños después de dejar su educación en manos de una institutriz, tampoco en su esposo que cree ver por todos lados de la calle en su peregrinaje en búsqueda de la chantajista, en ese estado de nervios, Irene piensa que una inyección letal de morfina pude poner fin a su miedo y sufrimiento.
No os descubro el final pero decididamente yo hubiera escrito otro completamente diferente, ese debate moral de Irene al final me chirría y el "buenismo" del marido me hincha las meninges, la vida de ahora no es así, son verdaderos cainitas y nos importa todo un bledo, solo la vida acomodada es un freno para algunas personas y afortunadamente la felicidad en otros casos pesa más en la balanza vital de las personas y por eso me permito deciros que mi final ideal hubiera sido que ella se hubiese marchado de su casa después de aclararse todo o si quiero escribir un guion para una peli, pues el que aparece sin vida al día siguiente que fuese el marido.
Las obras de Zweig son siempre edificantes, no os dejéis llevar por esa impresión mía un tanto "fría" comparada con otras obras, Zweig no escribe para narrar hechos si no para hablar de la condición humana y eso siempre es algo que nos lleva a la reflexión.

viernes, 9 de marzo de 2018

V de Venganza



Sue Grafton
Tusquets Editores
ISBN: 978-84-8383-409-1


He leído obras anteriores de esta novelista recientemente fallecida y lo tenía en el fondo de mis libros pendientes pero al enterarme de su deceso los volví a subir a los "próximos a leer". Las estructuras de sus novelas es siempre parecido pero las tramas son siempre diferentes y bastante atractivas para cualquier lector que se precie, es posible que algunos las encuentren un poco "antiguas" porque no hay WhatsApp, internet o avances forenses estilo CSI pero eso no le resta ni un ápice a la hora de trazar la trama y de que te termine por caerte bien esta investigadora privada, Kinsey Millhone. Acostumbrados a hombres en el que el papel principal y encima de investigadora que lo haga una mujer, supone una novedad pero no es tal porque la trayectoria de esta novelista es extensa y de calidad, se cuenta que creó este personaje para poder sobrevivir tras su divorcio; su primera novela data de 1982 y creo poder afirmar que ha sido la precursora de todas la novelistas del genero negro que ahora editan con éxito.
Esta novela esta datada en 1988 por eso no es extraño que se eche de menos los teléfonos móviles u otros adelantos, lo que si me gustaría es ver a esta mujer tan concienzuda al volante de su Mustang, porque mira que me gusta ese coche, en fin sigamos, la novela arranca con un joven universitario aficionado al póker que pide dinero prestado a un prestamista pero su suerte no mejora y su deuda se termina pagando dando un salto desde un edificio de Las Vegas, es comienzo alejado en el tiempo de la investigadora privada no tiene nada que ver con un robo de ropa interior en unos grandes almacenes, bueno, no tiene  nada que ver hasta Kinsey mete las narices en un caso de una de estas ladronas detenidas que se ha suicidado aparentemente y que es encargado por su novio, un viudo que vive en la más absoluta inopia de los que es su "amorcito".
Tirando del hilo y con su clásico trabajo de pico y pala, Kinsey descubrirá toda una red de ladrones profesionales y perfectamente organizados que trabajan para un gángster de cuello blanco que trata de vender una imagen de hombre de negocios aunque no deja de ser un simple perista y un prestamista sin escrúpulos, Dante, o mejor dicho los tiene, el que carece de ellos es su padre y su hermano, Cappy, un hermano que quiere coger las riendas del negocio pero que está en tratos con la policía. El jefe del cartel, Dante, por destinos de la vida termina conociendo a la madre del estudiante universitario fallecido y ya nada será lo mismo; ella, Nora, por querer dejar a su infiel marido, un abogado de éxito y por otro lado, la arrolladora personalidad de este prestamista que quiere dejarlo todo.
Kinsey cumplirá 38 años en esta trama, la partirán la cara y verá peligrar la vida de un raterillo, Pinky,  que le cae bien pero que se librará del plomo pero no así su chica, de lo que no se librará es de los platos de comida húngara de su bar de toda la vida ni de las suspicacias de algunos excompañeros de su marido que la siguen culpando de la muerte de este, pero no todos y precisamente los que no la miran con buenos ojos son aquellos que tienen mucha porquería bajo sus pies, Len Priddy, y que gracias al poder de la prensa o a la voracidad de Diana una joven periodistas puede ponerle freno a sus prácticas más oscuras.
Las novelas de Grafton son siempre muy entretenidas, ágiles y amenas, como decía alguno las pude tachar de "antiguas" pero no quiero ni pensar que dirán de las obras maestras de Hammett; los "malos" pueden tener un pasado oscuro tras ellos pero no se escudan en ello para justificar sus hechos, no hay un papel redentor o salvador y no lo hay porque en la vida tampoco lo hay, por eso me gustan sus obras. No es imprescindible hacer una lectura cronológica, seguro que es mejor, pero son casos que se cierran y sin continuidad en el tiempo, solo Kinsey, su vecino y Rosie; si queremos sacarle punta a la novela y por ser puntillosos, yo le quitaría esos deleites culinarios de cocina húngara que no aportan nada; que nuestra protagonista se vuelve predecible cuando en otras novelas no lo es y que no es hasta el final cuando el rompecabezas se une, que ves las relaciones de todos los personajes -al principio no sabes que pintan unos u otros con respecto a la trama-.
Hay creo que una novela última de la serie pero en cualquier caso, en la feria del libro seguro que se vienen conmigo algunos de los títulos de esta interesante escritora.