viernes, 9 de noviembre de 2018

La Desaparción de Josef Mengele



Olivier Guez
Tusquets Editores
web: www.tusquetseditores.com
ISBN: 978-84-9066-537-8

Acabada la segunda guerra mundial, las grandes potencias corrieron a hacerse con los servicios de los ingenieros alemanes que habían creado muchas de las nuevas armas pero no solo eso, los aliados viendo que se les venía la guerra fría encima reclutaron a muchos de los antiguos dirigentes y oficiales del ejército alemán recientemente derrotado, en ese jaleo buscando personas que pudieran servir a sus intereses aprovecharon algunos de los criminales de guerra nazi para escapar de una Europa destruida pasando o quedándose en España como hay algunos ejemplos o para recalar en Argentina, Brasil y Paraguay; el poder en Argentina en esos años lo detentaba un filonazi como Perón y aprovechándose de sus contactos al alzarse con el poder, se rodeó de personajes siniestros de la recién llegada Europa pero con un pasado blanqueado; así por ejemplo allí recaló Udet -el piloto más laureado del régimen y experto destructor de tanques del frente oriental y a su vez, nazi convencido y recalcitrante-, Eichmann que fue el "diseñador" de la solución final de los judíos o Skorzeny, oficial de las SS famoso por haber liberado de Mussolini de su apresamiento cuando Italia se desmoronaba con el avance aliado o por ser el artífice de los comandos en la ofensiva de las Ardenas; y en ese plano aparece el Ángel de la muerte, el médico de Auschwitz y aprovecho para pediros que leáis por encima aunque sea en la Wikipedia la biografía de algunos de estos personajes porque son escalofriantes porque estamos ante personas "normales" que compran el pan en tu panadería, profesores universitarios de fama académica mundial y sin embargo en el periodo de unos pocos años se convirtieron en verdaderos genocidas a los que no temblaba el pulso a la hora de mandar a los civiles a las cámaras de gas por el mero hecho de ser diferentes en pro de una pureza racial que empieza a apestar de nuevo.
Perseguido por los servicios secretos de medio mundo, por el eficaz y cruel a su vez Mossad, Mengele irá escapando de las posibles trampas que le vayan poniendo, cambiando de nombre, de ciudad y siempre con el apoyo de antiguos camaradas de partido que han escapado de la purga de los aliados, del pasotismo del la recién creada República Federal Alemana, del favor de los dictadores del cono sur como Perón o Stroessner y así conseguirá sobrevivir hasta su muerte por ahogamiento en el mar sin haber pagado su culpa por los crímenes cometidos y con el convencimiento de que estaba haciendo un servicio a Alemania, al mundo y a su fuhrer.
Escrito  de una forma muy original y casi a modo de diario sin hacer anotaciones personales del personaje, ves como va salvando los diferentes episodios a los que tiene que enfrentarse y siempre de forma satisfactoria para Mengele y creando cierto mito de escapismo que bien podría hacer que de segundo apellido llevase Houdini; veremos la personalidad egocéntrica y vanidosa de este asesino de masas, sus relaciones con sus esposas y su hijo al que trata de hacer ver la "bondad" de su obra sin conseguirlo, como es apoyado por la familia hasta el final de sus días y como las autoridades germanas tampoco pusieron mucho énfasis en buscarle y eso me lleva a hacer ciertas comparaciones con nuestro país y la ley de memoria histórica.
Mengele envejecerá, enfermará y será hasta operado, pero ni por esas será detectado por e famoso Mossad, escapará por los pelos cuando parece que es detectado pero no se si parte de la leyenda o si realmente estaba donde dicen que estaba porque a juicio de periodistas de otros medios, ha seguido vivo incluso después de su muerte, tuvo que ser un análisis forense el que pusiera fin a esta historia de fuga y anonimato.
La novela es cortita y se lee en un suspiro, a mi el formato me ha gustado, me ha gustado como lo ha tratado el mismo Olivier Guez , creo que ha llevado de forma muy acertada el apoyo que recibieron todos estos hombres fugados de la justicia y sobre todo, la forma en la que moldea a otros personajes con los que se relaciona el mismo Mengele.
Un acierto y una buen rato de lectura, y tranquilos, no cae en explicar los horrores de la guerra si es eso lo que os hecha para atrás para leerla.

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