Cómo se hace una chica

Caitlin Moran

Editorial Anagrama

web: www.anagrama-ed.es y www.caitlinmoran.co.uk

ISBN: 978-84-339-7925-4

Ya este libo llamó mi atención cuando lo encontré en una librería pero hasta que no escuché la entrevista que realizaron en la 2 -si, yo veo la 2- a la escritora mi interés se acrecentó y me hice con él. Que el título no os engañe, no es un manual de Ikea sobre como construir a una joven adolescente británica y tampoco es un diario de una joven incomprendida, es mucho más, pues más profundo, más intenso, más crudo y muy real que puede emocionarnos a ratos, deprimirnos en otros pero sin caer en el pozo del que no se sale porque la protagonista de esta novela, Johanna Morrigan, es una luchadora nata aunque se equivoque, aunque tome caminos equivocados, porque es consciente de cuando se equivoca que debe tomar otro camino.

Caitlin Moran hace una fotografía de clases sociales perfecta, la que va desde Wolverhampton un barrio en las afueras de Londres donde viven familias destrozadas por las políticas de la dama de hierro y con menos esperanzas que un "cochino jabalín" en un poblado de Eritrea y los barrios de las afueras donde viven las clases pudientes en sus casas unifamiliares con sus BMW, sus colegios de pago o sus clubes de campo o sus cachorros con sus carreras terminadas y que por toda protesta social es escribir en una revista de música.

Hay muchísimas alusiones a la cultura británica, tanto musicales como televisivas y hace que nos perdamos matices muy importantes para saborear el relato pero obviando esto y tratando de hacer analogías para comprender mejor el relato, este pequeño salto cultural no le resta ni un ápice de interés al texto.

Johanna Morrigan es una joven británica, que vive en una familia que subsiste con subsidios y que está repleta de sueños, atormentada por su peso, por no haber besado todavía a un chico pero dispuesta a cambiar su sino, después de un relato premiado se anima a intentar entrar en una revista de crítica musical aún cuando su "cultural" musical depende de los ejemplares que pueda pedir en la biblioteca próxima y es cuando se conviert en Dolly Wilde, el azote de los grupos indies.

En ese nuevo status Johanna prueba el alcohol, el tabaco, las drogas, el sexo y sus primeras relaciones amorosas; ese tránsito de la adolescencia hacia la edad adulta será lo que marque el devenir de la joven Johanna, porque Johanna no se desentiende de la vida que vive con su familia a la que quiere, no hay nada más que ver como se lleva con su hermano mayor Krissi o el pequeño Lupín porque los gemelos aún son demasiado pequeños para decir mucho o el respeto y cariño que tiene por su padre, un hombre que vive de sueños y de las subvenciones y con las que mal mantiene a su familia, hay un detalle muy hermoso al final con respecto de su relación con su madre pero no quiero desvelaros nada porque me ha enternecido hasta el tuétano.

Admito que la etapa en la que descubre el sexo y se lanza a una carrera desenfrenada no me ha parecido tierna o excitante pero cuando somos adolescentes y descubrimos el placer nos comportamos ciertamente como bonobos pero son etapas de la vida; incluso me choca con lo luchadora que es y en como se conforma en que en las relaciones que tiene solo por hacerse un lugar en el mundo rechace que ella tenga placer de esas relaciones. Johanna se transformará en ese personaje creado por ella para la revista que es Dolly Wilde hasta que se de cuenta de que eso no es lo que ella quiere ser y ahí es donde te das cuenta de lo fuerte que es esta tierna muchacha, que solo quería tener su sitio en el mundo y a la que si no lleva chistera y se anuncia como la diosa del sexo nunca harían caso.

Entre la ácida e irreverente Dolly y la tierna y amorosa Johanna me quedo con la segunda, la que quiere a su padre a pesar de que le trapichee unas libras a la primera de cambio, la que se preocupa de su familia y de que le lleguen las ayudas, la que se acurruca con Lupin o la que cuenta confidencias con su hermano dentro de un armario o baila como una loca al ritmo de los Bee Gees.

Una gran novela, con una gran dosis de acidez que parece una cosa pero que es otra.