Edward Abbey
Editorial El Paseo
ISBN: 978-84-19188-26-7
Este libro podría estar perfectamente editado por la colección de libros salvajes de Errata Naturae, igual se les ha escapado, pero reúne todas las características de esa curiosa e interesante colección de relatos con la naturaleza como protagonista.
Sol negro esconde una triste historia de amor de un hombre solitario con una joven, Will y Sandy, un hombre que vive vigilando los bosques para evitar los incendios que por todo contacto humano tiene un amigo y una mujer con varios hijos pero con la que no vive ni convive; Sandy es una joven que se ha prometido a un futuro piloto de la USAF (fuerza aérea de USA) pero que se siente seducida y fascinada por este hombre maduro y solitario que es Will, decide irse a pasar un tiempo con él hasta que a pesar de amarse lo deja, pero deja a todos y ees cuando el propio Will, que nunca se ha atado con nadie, ni con mujeres ni hombres -solo tiene un amigo al que apenas le hace caso y que es un verdadero caso por sus relaciones personales, o quizás los indios hopi que viven en el entorno y están rodo el día alcoholizados- cuando se da cuenta de que ama a Sandy. con uda dosis poética indescriptible, tanto de espacios como de personas o situaciones, Abbey hace una novela muy profunda y salvaje, tanto por esa soledad aceptada pero que se vuelve contra él, como por lo hondo que llega al corazón del lector. Ojo no busquéis reivindicaciones ecologistas porque no las hay, nos movemos en otros años, todavía las latas de cerveza vacías se tiraban por la ventana del 4x4 o se pegaba un tiro a una cierva estando en época de veda por el mero hecho de hacerlo. A cambio disfrutaréis de paseos por el Gran Cañón, pasaréis sed, oleréis la madera recién cortada para hacer fuego u orinaréis en la nieve para que los ciervas vengan a lamer en los restos.
Probablemente el que hubiese fallecido su mujer de leucemia pocos meses antes hicieran que esta novela sea ese grito contra la soledad que Abbey escribe tan bien, estoy seguro que hará la delicias de muchos de vosotros y a mi me recordó a mi novela de cabecera "Donde los ríos cambian su curso" de Spragg y que para mi fue un antes y un después tras su lectura.
Libro de chimenea y manta, de té o café calentito y leer con pausa y calma, libro para saborear absolutamente todo.
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