Craig Johnson
Ediciones Siruela
web:www.siruela.com y www.craigallenjohson.com
ISBN: 978-84-9841-875-0
Cronológicamente es la segunda novela del sheriff Walt Longmire y por el tiempo que lleva publicada es posible que os cueste encontrarla como me ha pasado a mi que ya la buscaba en la feria del libro pasada pero el que persiste al final se lleva la perra gorda y la encontré.
En esta segunda novela veremos las conexiones entre el viejo sheriff del condado de Absaroka y el mismo Walt, la llegada del que luego será un componente indispensable del equipo, el vasco Santiago Saizarbitoria al que llamarán con el apelativo cariñoso de Sancho, las relaciones en esta pequeña comunidad donde todos se conocen, son familia o casi, el papel de la minoría vasca en el estado de Wyoming, las relaciones con los habitantes originales de esas tierras sean de la tribu que sean (crow, cheyenes, pawnee, etc.) y hago notar el trato que le da el antiguo sheriff en comparación con el actual y me viene a la memoria la retirada de la estatua de Colón en Los Ángeles por genocida porque aún no quepo en mi de estupefacción; bueno sigamos, la novela sigue los trazos de las otras del mismo autor y protagonista que podéis encontrar en este espacio.
Me gusta este escritor porque me cae bien este tipo con barbas de más de 1,80 amigo de Henry Oso en pie, veterano de Vietnam que no echa la culpa de sus males a nadie y que tiene una conexión con los espíritus de los habitantes de la llanuras; es sencillo que caiga bien Walt, es un hombre parco, buen padre aunque el piense que no lo es al tener "desatendida" a su hija en Bostón y lo comprobaréis si leéis una posterior novela que transcurre en dicha ciudad y con la hija de protagonista sin quererlo ella; es fácil que te caiga bien Henry Oso en pie, su forma de hablar con ese "tú"con el que acaba sus frases cuando habla con Walt, su forma de enfrentarse a las cosas y los problemas, quizás demasiado tipificado pero que en papel aguanta bien pues con esos personajes principales Craig Johnson ha trazado una estupenda historia que arranca con la muerte de Mari Baroja, su relación con el viejo sheriff y la aparente muerte extraña para Walt porque para el resto no deja de haber sido por la edad y los achaques de la pobre anciana vasca da lugar a una historia que echa sus raíces en hechos de hace 50 años, en una explotación de metano que genera un cerro de dólares a las herederas de la fallecida; la fallecida fue brevemente la mujer de Lucian, el viejo sheriff, pero su familia le dio una paliza y se la llevó casi para siempre, el hecho de internarla en la residencia sirve para que retomen ese vínculo roto desde hace tanto y es el mismo Lucian el que pone en alerta a Walt sobre esa muerte.
El invierno que describe Craig Johnson no se hace pesado, notas el frío y la nieve, a los coches haciendo derrapajes en las curvas, el vaho en las respiraciones y todo en un entorno natural que todavía no hemos destruido, no si se el entorno será tan naturalmente idílico pero a mi me seduce, esa América profunda que seguro que vota a Trump porque no tienen mas referencias que lo que dice la Fox, que sigue siendo racista y lo seguirá siendo y ojo, no es eso lo que me seduce porque es todo lo contrario, me seduce el entorno y algunas de las relaciones que se mezclan a los que son distintos como son Henry con Walt, Henry con Cady la hija de Walt porque si analizamos cuidadosamente no hay mezclas entre las diferentes comunidades, no hay ningún mestizaje.
La trama discurre de forma muy ágil, amena que apenas te da un respiro, pero es la tónica general de las obras de Craig Johnson, de extensión perfecta porque sigo pensando que una novela no de debe de exceder de las cuatrocientas páginas y ninguna de ellas las pasa, con un giro al final de la obra que pondrá blanco sobre negro de forma inesperada, es difícil conectar hechos pasados sin perderse en detalles o anécdotas sin importancia para la trama pero creo que Craig Johnson lo ha hecho muy bien, dándonos unas cucharaditas de información para que nuestra ansía por leernos la novela sean voraces y la devoremos en un suspiro y con una sonrisa en la cara.
Creo que sería interesante para el o la que quiera acercarse el universo de Walt Longmire que empiece por al primera novela, para no perderse algunos detalles y por como crece el personaje a lo largo de la serie aunque si quieres leer solo una, tampoco pasa nada, tiene suficientes detalles para que te hagas la composición de lugar sin sufrir unas pérdidas narrativas considerable.
Y para finalizar os dejo la reflexión con la que comienza la novela y que dice que es un proverbio vasco: "Una vida sin amigos acarrea una muerte solitaria".
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