Lee Child
RBA Ediciones
web: www.rbalibros.es y www.leechild.com
ISBN: 978-84-9006-515-0
Estamos ante una novela muy popular, un best seller, pero una americana en toda regla, reúne todos los clichés que se os pasen por la cabeza pero cumple su objetivo, te atrapa, te inunda de testosterona y con violencia y golpes a tutiplén, atractivo de casi dos metros y ojos azules y en buena forma física, vamos el sueño de parecerse a él de muchos hombres y de que se le aparezca a muchas mujeres -las otras variaciones sobre gustos sexuales también son válidas pero no las pongo para no extenderme.,
Curiosamente el escritor no es norteamericano, es británico aunque ahora vive en el país de las barras y estrellas, su trabajo como abogado y en la televisión le brinda una buena perspectiva a la hora de darle verosimilitud a las historias además de realismo televisivo que hacen muy atractivos a los lectores sus relatos.
Jack Reecher es un solitario y ex-oficial del la policía militar del ejercito del tío Sam, un vagabundo que deambula por aquí y por allí, sin papeles, sin tarjetas de crédito o teléfonos móviles y con un único contacto bancario que es donde le ingresan la pensión de oficial retirado, vamos un indocumentado en toda regla, encarnando un papel de lo ético, lo justo y lo honorable, Jack se ve envuelto en un caso donde para resolverlo, no será ni honorable, ni justo, ni ético; eso de ser juez y parte debe estar muy metido en el inconsciente colectivo de EEUU pero a mi me chirría aunque alguna vez me gustaría que se aplicase aquí en algunos casos concretos. La muerte de un hombre en un pueblo perdido de Dios donde es acusado injustamente encienden su prurito profesional y le incentivará a estudiarlo con atención, la muerte de su hermano es ya el detonante para convertirlo en algo personal.
La muerte de ese desconocido se complica con la aparición del jefe de policía y su familia ejecutado de forma brutal en su propia casa y desde entonces se encarga del caso el alcalde de Margrave, localidad donde suceden los asesinatos, Teale, Reacher por toda ayuda solo podrá con el jefe de homicidios, un policía de Boston que se ha trasladado al pueblo, Finlay y una policía que como no, se siente atraída por él, Roscoe; las pesquisas de los tres les llevará a destapar un entramado de falsificación de moneda sin precedente y en el que estaba trabajando el hermano de Jack, Joe.
Tenéis ante vosotros quinientas páginas de gente que se toma la justicia por su mano, que mata como si hiciese palomitas en el micro-ondas, con secundarios crueles y sin escrúpulos, el viejo Kliner y su hijo o el amigo del FBI de Finlay, de observadores atónitos típicos de una película donde el racismo todavía es otro personaje, los dos trabajadores de la barbería a los que sin querer tomas cariño, o un contable que parece que se derrumba pero no es tan tonto como parece, ¿no creéis entonces que está repleta de clichés? pues aún así, se lee con agilidad, con ganas de ver que van a hacer los métodos brutales y poco ortodoxos de Jack para solventar la situación y es que al final, de vez en cuando todos leemos algún producto de nuestros más bajos instintos porque Jack es violento, vengativo, juez y parte, con un sentido del honor que no respeta lo mismo que él no respeta, es una reencarnación de Rambo, Chuck Norris, Clint Eastwood y John Waine pero engancha -y eso me preocupa un poco- y todo bañado de "sirope" de violencia y golpes.
Este es el primer libro de la serie de Jack Reecher; al final del ejemplar RBA los tiene de forma cronológica así como los títulos que ya ha publicado y una pequeña sinopsis.
En resumen, una novela de acción trepidante, muy atractiva de leer y que a más de uno le hará ver las películas -aunque sea difícil de ver a Cruise en el papel-.
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