Ian McEwan
Editorial Anagrama
ISBN: 978-84-339-7874-5
Estamos ante una novela muy interesante como todas las que han caído en mis manos de McEwan, nada es como lo esperas, nada va por donde parece que va a ir y lo que supones que es una novela de espías es otra cosa, en la contraportada el diario The Observer dice que es que como una muñeca rusa y la comparación es perfecta; cuando me la regaló mi Baltasar particular allá por reyes la miré con ojos "golositos" y la coloqué de forma estratégica en mi columna de libros pendientes haciendo trampas porque sabía que me gustaría, que disfrutaría de ella y no me ha defraudado; toda la novela es una continua trampa que sólo al final conseguiremos comprender, la trama es sólida, los tratamientos sutiles y tomando palabras de la contraportada, muy inteligente y quiero dejar una pregunta en el aire, ¿sería verdad que los servicios de inteligencia británicos las mujeres desempeñaran esos papeles tan "arcaicos" y machistas?.
El punto fuerte está en que los giros argumentales no son forzados, se suceden suavemente pero de forma categórica y con gran ingenio, el que toda la novela esté vista a través de la protagonista femenina, Serena, y el último capítulo por Tom en un ejercicio de empatía supremo es un colofón perfecto para la trama.
Imagino que después de la lectura de esta novela más de uno y de dos se dejará llevar por tramas manipuladoras mundiales del estilo de la conquista de la Luna filmada en un estudio por Kubrick o el platillo de Roswell, en fin, no perdáis el tiempo en esas cosas, la explicación más sencilla siempre suele ser la correcta.
Durante la guerra fría en pleno apogeo de los conflictos entre árabes e israelíes el MI5 -parte del servicio secreto británico, el que se dedica a temas "internos"- una joven estudiante de matemáticas, hija de un obispo anglicano de orientación conservadora es reclutada, aunque carece de conocimientos sobre literatura a pesar de ser una lectora compulsiva es encargada de patrocinar a escritores que en sus escritos hagan propaganda anticomunista con el fin de crear opinión; lo que no podrá hacer Serena Frome es controlar sus sentimientos hacia su apadrinado, Tom Haley, un escritor inédito que no sabe nada de la trama por la que cierta sociedad le patrocina, publique o no.
Quiero hacer memoria y me parece que por esos años también era cuando los miembros del IRA cometieron sus atentados más sangrientos pero este punto no lo he verificado pero en la novela tiene sus referencias.
La vida de Serena está salpicada por relaciones con otros hombres -todos mayores que ella-, una de esas relaciones es la que la hace entrar precisamente en el MI5 y otra, la que probablemente pudiese dar con ella en la calle, ni sus compañeras de trabajo parecen ser lo que son.
Las referencias literarias pueden abrumar a más de uno, yo uno de ellos, por ejemplo cuando se citan autores o poesías británicas pero si lo tomáis como forma de la trama si profundizar en esas obras no pasa nada o a mi no se me ha caído los ojos por no hacerlo. El pasar del tiempo hace que nuestra protagonista se enamore precisamente de su apadrinado Tom, el hecho de que se vea premiado con un prestigioso galardón literario por una obra apocalíptica -Los llanos de Somerset- que no termina de convencer a los jefes de Serena y por tanto vigilantes del proyecto Dulce desemboca en otra historia de celos y males de amor mal curados que desbarata todo.
El capítulo final en el que está escrito en primera persona por Tom es catártico, NO lo leáis antes de tiempo, no busquéis espías que salvan al mundo de la perversión comunista o capitalista, pero temer si, a los que desde sus sillones nos dicen que hacer, pensar o decir.
Otra reflexión que quiero dejaros y precisamente al hilo de la noticia del botellón universitario en Granada, en esta novela de McEwan los británicos se las pillan dobladas, ¿por qué en los informativos nos hacen parecer el paraíso del alcoholismo, a quién beneficia?
Y con esto, os dejo esta gran novela de McEwan del seguro ya habréis leído alguna anterior.
Tu blog es mejor que hojear una biblioteca. Siempre encuentro referencias interesantes o descubro publicaciones que me abren el apetito, el justo, porque lo presentas como un apetitoso aperitivo, no como un predecible postre.
ResponderEliminarTomo nota, Ángel.
Un besote.
Gracias Marisa, me vas aponer colorado
EliminarCuando creé el espacio estuve tentado de hablar de las tramas de forma más extensamente pero con eso corría el riesgo de destrozar el libro a quien quisiera leerlo, prefería hablar de sensaciones y eso es lo que intento, espero que con fortuna, porque leer es una experiencia que a cada uno le supone una cosa distinta.
Este año de momento estoy teniendo suerte con todo lo que ha caído en mis manos, ya veremos cuando caiga el libro "horribilis" del año porque tiene que caer, jeje.
Besotes y que tengas un feliz fin de semana.